Paganini: “Queremos pasar de ser un polo de negocios a ser un polo de innovación”

El ministro de Industria y Energía, Omar Paganini, disertó este 2 de agosto en un almuerzo de negocios organizado por la Cámara de Comercio Uruguay-Estados Unidos. En su intervención, resaltó el desarrollo de la industria de software, entre las potencialidades del país, así como la estabilidad política y jurídica de este para atraer inversiones, y consideró que Uruguay debe pasar de ser un polo de negocios a uno de innovación.

Acompañaron a Paganini, en su presentación “Oportunidades para Uruguay en un mundo de transformación energética e innovación tecnológica”, los ministros de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Raúl Lozano, y Transporte y Obras Públicas, José Luis Falero; el subsecretario de Industria, Energía y Minería, Walter Verri, y el presidente de Antel, Gabriel Gurméndez.

Paganini sostuvo, en su oratoria, que el desarrollo del país debe partir de la libertad responsable. Agregó que cuando se habla de ello se piensa en el desarrollo de las personas, pero también debe entenderse para la economía, para emprender y crear. “Debería ser prácticamente el lema de todo lo que vamos a hacer de aquí para adelante”, dijo.

También consideró que Uruguay deberá pasar de ser un polo de negocios, como lo es hoy, a uno de innovación. Esta oportunidad se basa en sus políticas estables y el sistema tecnológico. En ese sentido, destacó la trayectoria de 30 años de avances del sector de software exportador, "pujante y atractivo para el mundo". Según manifestó, el Gobierno busca facilitar los emprendimientos privados y fomentar el interés de aquellos que quieran radicarse en el territorio nacional.

Por otra parte, se refirió a las reformas en seguridad social y educación que están en curso y resaltó el potencial uruguayo para liderar el mundo en nuevos combustibles, con base en sus energías renovables, dióxido de carbono (CO2) biogénico e hidrógeno verde.

Aludió a la trayectoria nacional en energías renovables, que comenzó en 1930 con la represa del Rincón del Bonete, y la que se inició en 2011 al incorporar la eólica y la solar. Mencionó la segunda transformación energética y las oportunidades que generarán esos cambios, que conllevarán, según la hoja de ruta realizada, unos 35.000 puestos de trabajo en 2040 y cerca de 20.000.000 de dólares de inversión. “Lejos de constituir una actividad meramente extractiva, creará empleo de calidad para los uruguayos”, subrayó.