Ponen de manifiesto proyecto de construcción de 29 edificios en el extremo sur de Punta Ballena

El emprendimiento se desarrolla en seis predios que los sucesores de Antonio Lussich recuperaron en 1997 gracias a un fallo de la Suprema Corte de Justicia, que puso fin a un largo litigio con la Intendencia de Maldonado.

El ministerio de Ambiente puso de manifiesto en las últimas horas el proyecto “Complejo Residencial Punta Ballena” impulsado por un grupo de inversionistas liderados por el poderoso banquero argentino Delfín Jorge Ezequiel Carballo que consta de 29 edificios con un total de 320 spartamentos en un conjunto de lotes cuya superficie total alcanza a las 9 hectáreas. La obra se cumplirá en 6 etapas que demandarán un plazo de unos 7 años de ejecución de obra empleando entre sesenta y setenta obreros por mes de forma directa.

Como adelantó Correo de Punta del Este, el financista argentino tramita ante el ministerio de Ambiente la habilitación ambiental para poder construir los veintinueve edificios. Los responsables de la propuesta adelantaron que mantendrán “intocado” el frente rocoso de ambos lados de Punta Ballena y que la altura de los edificios apenas pasará, en unos pocos casos, el metro por encima de la visión que se tiene desde la ruta Panorámica.

Informe ambiental
El informe ambiental también destaca que la propuesta incluye la cesión de tierras a la Intendencia de Maldonado para lograr el acceso al uso público a miradores y a la punta de Punta Ballena. El proyecto se desarrollará a ambos lados de la ladera de la Sierra de la Ballena sobre la ruta panorámica Carlos Páez Vilaró.

Esto determinará que se mantendrán liberados al uso público el mirador del extremo sur con su visión de 360 grados, otros dos miradores, uno hacia el este y el otro hacia el oeste delimitados ambos por la ruta Panorámica y la propia avenida “Carlos Páez Vilaró, “la totalidad del área asignada al dominio público, corresponde a 64.257 m2 correspondiendo casi al 40% del total del área de Proyecto. Esta magnitud total significa que el área de dominio público en Punta Ballena se incrementará en un 382 % de su área original”, indica la propuesta.

Criterio arquitectónico
“La ubicación de las construcciones se adecua a los criterios de construcción previstos para el entorno de la panorámica”, sostiene el informe.

“El diseño del conjunto busca optimizar la inserción del mismo en el entorno, cumpliendo con los parámetros de edificación establecidos por la normativa municipal y respetando la topografía del terreno generando bloques curvos que acompañan las curvas de nivel del terreno. Los bloques ocupan la zona de menor pendiente del perfil de la península, situada entre la Ruta Panorámica y el límite superior del perfil rocoso de fuerte pendiente que enfrenta al mar”, agrega el documento.

“En cuanto al paisaje, la ubicación de las construcciones se adecua a los criterios de construcción previstos para el entorno de la panorámica. En algunos breves tramos aislados de la fachada, se superan los niveles de la ruta (entre cero y un metro máximo) pero siempre dentro de los criterios de construcción admisibles para esta zona, lo que permite mantener las visuales hacia el entorno desde la panorámica en la zona de proyecto. Sumado a esto el proyecto contempla preservar miradores en los lados Este, Oeste y extremo Sur de la Punta Ballena, con el fin de mantener prácticamente incambiadas las condiciones actuales para el disfrute del paisaje en el recorrido de la Ruta Panorámica", describen los impulsores del proyecto.

"Por otra parte, la propuesta estructural consiste en fundaciones directas con el fin de requerir el mínimo imprescindible de excavación necesaria, para lograr integrar los bloques aterrazados en la pendiente del terreno. Con el fin de lograr la integración visual del proyecto se implementarán cubiertas enjardinadas incorporando vegetación en las fachadas que a su vez serán revestidas de piedra y hormigón pintado en colores que se integren al paisaje”, indica la propuesta.

Antecedentes
El proyecto se desarrolla en seis predios que los sucesores de Antonio Lussich recuperaron en 1997 gracias a un fallo de la Suprema Corte de Justicia, que puso fin a un largo litigio con la Intendencia de Maldonado. Esa parte del Lomo de Punta Ballena había sido tomado por la administración del extinto intendente Gilberto Acosta Arteta mediante una expropiación cuyo trámite nunca prosperó.

Con el tiempo, el financista argentino Delfín Jorge Ezequiel Caraballo fue comprando parte de la participación de la familia Lussich hasta tener una importante tenencia de la tierra. La propuesta fue presentada por Delfín Ezequiel Carballo González, Eduardo Carrera Hughes, Lucía Carrera Ponce de León, María de las Mercedes Jude Gurméndez, Carmen del Castillo Soriano y otro grupo de propietarios representados por Andrea Carbonell.

El fallo de fines de los noventa ordenó a la intendencia de Maldonado devolver el predio desde el límite sur de Casapueblo hasta el sur, incluyendo las Grutas y parte de la playa adyacente. La entonces jueza letrada de 7º turno de Maldonado, Martha Chao de Inchausti no solo ordenó la entrega de la tierra sino que, además, exigió que se levantaran los útiles de propiedad comunal. Esto es, la ruta Panorámica y los miradores.

Con el correr de los años fue negociándose un acuerdo entre los propietarios y la Intendencia que culminó años atrás con una salida. El acuerdo fue refrendado por el intendente Enrique Antía con la anuencia de la Junta Departamental de Maldonado. El citado acuerdo establece que se mantendrá el trazado de la ruta Panorámica y los miradores así como también bajadas en ambas laderas de la península para los pescadores.
Como contrapartida, la Intendencia habilitó el proyecto que ahora está en el ámbito del Ministerio de Ambiente.

“El Acuerdo tiene pues como objetivo concreto poner fin a un largo litigio sobre la zona de Punta Ballena, que la Justicia ha reconocido de propiedad privada, y se encuentra actualmente sometido a la única condición de la aprobación del proyecto por la autoridad ambiental. Fue otorgado el 24 de julio de 2014, aprobado por Resolución Nº04197/2012, dictada el 15/6/2012, por el Intendente Departamental de Maldonado. Tras ello, ambos se remitieron a la consideración de la Fiscalía Letrada Departamental de Maldonado, que se expidió favorablemente; y sometidos a la aprobación de la Junta Departamental de Maldonado, que los aprobó por unanimidad, concediendo la anuencia en sesión celebrada el 8 de agosto de 2017, mediante Resolución Nº246/2017.

Posteriormente, se desarrolló y presentó la Comunicación Ambiental del proyecto que fue clasificado en octubre de 2020 en la categoría “C” (exp.: 2015/14000/10639), y consistía en el desarrollo de 37 edificios, ocupando una superficie de 40.582 m2, comprendiendo un total de 359 apartamentos. En el informe de clasificación se realizaron una serie de consideraciones que ponían en duda la viabilidad ambiental del proyecto”; explica el resumen ambiental elaborado por los propietarios.




fuente y foto: Correo de Punta del Este