Siniestro fatal del bus de Copsa: gerente de la empresa dice que la unidad estaba en condiciones de circular y que se le había hecho mantenimiento

Javier Cardoso, gerente general de Copsa, aseguró que el bus que ayer despistó y volcó en la Ruta 9 había sido sometido a control y mantenimiento y que estaba en condiciones de circular. La unidad 540 había pasado por talleres hace un mes y Cardoso negó que tuviera algún tipo de falla. En el siniestro falleció una adolescente de 15 años y una veintena de pasajeros resultaron lesionados, tres de ellos de gravedad. Un pasajero de un viaje previo dijo que el bus se movía de lado a lado y tres menores que viajaban junto a la adolescente fallecida dijeron a su madre que el chofer estaba manipulando el celular minutos antes del siniestro.

En declaraciones al diario El Observador, Cardoso aseguró que el coche había sido revisado y se le había realizado el control y mantenimiento de suspensión delantera y trasera hace un mes.

Aclaró también que ese coche, como los otros de la flota, son revisados de forma "periódica" y afirmó que el vehículo no tenía falla ninguna por lo que negó que el accidente haya sido un problema de repuestos, como publicó un pasajero en redes en base a una respuesta que habría recibido por parte del chofer de esa unidad en un viaje realizado a Montevideo, también este jueves, pero horas antes del siniestro fatal.

"Los coches tienen habilitación técnica. A ese coche no le cambiaron nada en los últimos días", aseguró Cardoso.

El gerente también señaló que el bus siniestrado es del año 2013 y que los coches tienen una vida útil de 18 años, por lo que todavía estaba en condiciones de circular.

En cuanto a los choferes, Cardoso dijo que se les hace un carné de salud anual para asegurarse de que están en condiciones de manejar los vehículos de la empresa, que tiene una flota de 300 coches. Tras el siniestro, la fiscal a cargo de la investigación ordenó la extracción de sangre del chofer para someterla a examen de alcoholemia y toxicológicos.

Una crónica del siniestro, publicada este jueves en el diario El País, indica que tres menores de edad que viajaban junto a la adolescente fallecida, y que no resultaron lesionados, dijeron a su madre en el lugar del siniestro que el chofer estaba manipulando el celular mientras conducía, minutos antes del despiste.

Iván Silchenko, un pasajero que había realizado un viaje hacia Montevideo en la misma unidad de Copsa, también este jueves, publicó en redes sociales que el bus se movía de lado a lado de forma brusca. Agregó que su madre, que viajaba con él, fue a quejarse con el chofer sobre la situación y que éste le respondió que era un tema de falta de repuestos.

Cuando finalmente llegaron a Tres Cruces, Silchenko y su madre fueron hasta el local de Copsa para dejar asentada una queja por la situación, pero finalmente no la realizaron porque había demasiada gente haciendo cola para comprar pasajes. Horas después, Silchenko advirtió que la unidad siniestrada era la misma en la que había viajado.

Sobre esta situación, el gerente de Copsa también aseguró al diario El Observador que a la empresa no llegó ninguna denuncia en ninguna de sus terminales.

"La pericia técnica es la que va a determinar si fue un tema mecánico o un tema humano", dijo.